A través de una adecuada implantación de sistemas debemos de garantizar el óptimo funcionamiento de la aplicación, siempre orientado a:
- Hacer la operación más sencilla
- Lograr un alto grado de autonomía por parte de los usuarios finales
- Optimizar los procesos de negocio según la aplicación a implantar
- Transferencia del conocimiento de la solución al usuario final
- Obtener información confiable y oportuna
- Utilización de la funcionalidad de la aplicación, eliminando procesos manuales o con herramientas alternativas
- Concluir la implantación en los tiempos y costos establecidos desde el principio
Una mala implantación de sistemas neutraliza las bondades del sistema y en muchas ocasiones conlleva a que los usuarios y los clientes piensen que el sistema no sirve.
Todos nuestros implementadores tienen al menos una carrera universitaria y en muchos casos uno o varios diplomados, además del continuo entrenamiento y capacitación que Alcofin les brinda como parte de un plan de capacitación orientado al mayor conocimiento y modernización de los temas que les atañe. De esta manera usted recibirá una asesoría profesional sin eliminar la asesoría de su gente de confianza y profesional.
Alcofin ha comenzado un proceso de capacitación y desarrollo para lograr una certificación ISO.